El Instituto de Estudios para la planificación y Desarrollo del Territorio (IET) de la Santoto Bucaramanga realiza planes de proyección social en este importante espejo de agua, que abarca 7.000 hectáreas que convergen a seis municipios de Santander, con el fin de garantizar el desarrollo económico, social y ambiental dentro de la región y sus pobladores.
Para Néstor José Rueda Gómez, docente tomasino, PhD en Planificación y director del proyecto, esta es una iniciativa clave “porque la Universidad debe estar presente en los desarrollos arquitectónicos, urbanos e iniciativas sostenibles territoriales. Nuestro deber ser como institución es aportar en la consolidación de planes que sean viables y sostenibles”.
La metodología contempló el levantamiento y diagnóstico de los emprendimientos que fueron identificados mediante trabajo de campo. Se realizaron socializaciones y ejercicios de co-creación con la comunidad a partir de cartografías participativas y se visitaron uno a uno los emprendimientos.
A partir de estos insumos los profesionales vinculados al proyecto, tanto de la Facultad de Arquitectura como de Química ambiental, están diseñando la propuesta final, consistente en un esquema básico de cómo podrían ser los emplazamientos urbanos y arquitectónicos de cada emprendimiento, así como el diseño de un modelo de negocio, el manejo de residuos y una ruta clara para los emprendedores locales.
Lo anterior, con la finalidad de que estos proyectos puedan ser presentados ante entidades gubernamentales o ante la misma CCB en búsqueda de recursos durante su fase de ejecución.
El objetivo tanto de la Cámara de Comercio como de la USTA, de acuerdo con las palabras del director del proyecto, es estimular el desarrollo de actividades turísticas en el embalse de Topocoro de forma ordenada, sostenible y en el marco de procesos de formalización dentro de la cadena de valor de las ofertas del turismo rural.
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