“La Universidad Santo Tomás apoya este evento con el objetivo de contribuir a la conservación de la memoria y del patrimonio, en este caso, el maíz, que hace parte de la cultura santandereana y de la cultura indígena y latinoamericana. Queremos que nuestra comunidad se involucre en el conocimiento de esta cultura del maíz, en la sana alimentación y en todo lo que de ella se deriva”, dijo Yina Paola Delgado, profesional de apoyo CRAI.
Durante el desarrollo de la actividad, estudiantes, docentes, administrativos y directivos pudieron admirar diferentes productos hechos a base de maíz, que se encontraban ubicados en el lobby del Edificio Santander; consultaron el recetario virtual que fue proyectado; observaron la instalación y performance del Maizóleo; recibieron el Taller de Linóleo, conversaron sobre el origen y presente del maíz, y disfrutaron de música campesina en vivo.
“Me parece muy importante que estas actividades se lleven a cabo en la Universidad Santo Tomás, puesto que es una forma de decirle al estudiante que existen métodos para expresar ideas, sentimientos y que el arte es un estilo para comunicarnos con los demás, de comunicar una idea, de comunicar lo que pensamos, de plasmar lo que sentimos. Es muy importante acudir a la comprensión de la Universidad Santo Tomás, que me ha parecido muy buena y, sensibilizamos a la gente con respecto al maíz y a las semillas, a lo que nos corresponde, nos pertenece”, concluyó Henry Olarte Álvarez, maestro en Bellas Artes.
