La Escuela de Verano 2018 maneja tres ejes fundamentales: Artes y Cultura, Derechos Humanos e Inclusión y Habilidades para la Vida, que le permiten a los docentes fortalecer sus habilidades blandas y crear nuevos procesos de formación para los estudiantes.
Entre los cursos cortos que ofrece la Universidad se encuentra el Taller de Artes Plásticas, un espacio donde los docentes mediante actividades dinámicas de reconocimiento propio y del otro pueden mejorar sus habilidades artísticas de dibujo, escultura, moldeado; mientras disfrutan con sus compañeros en un ambiente natural.
En esta oportunidad los docentes quisieron compartir con la comunidad Tomasina su experiencia
El curso de Artes Plásticas me ha parecido excelente, tenemos una oportunidad diferente a estar en el aula, es una actividad en campo abierto, el profe está pendiente, hacemos diferentes propuestas, se siente uno bastante relajado, y a mí me encanta, como soy odontóloga también me gusta la parte artística. Así que estoy encantada de este nuevo curso de verano.
Juan Alejandro Cano, docente de la Facultad de Arquitectura
El taller me ha parecido muy interesante porque nos ayuda a percibir el entorno que tenemos en la Universidad. Estamos viendo clases en las zonas verdes, eso hace que tengamos una conexión más fuerte con nuestra Institución y que percibamos cosas que normalmente no nos damos cuenta que existen en nuestro lugar de trabajo. Es un taller donde nos podemos relajar, en el que aprendemos muchas cosas que podemos aplicar en nuestras clases y aportarles a nuestros estudiantes.
Amparo Reyes, docente del Departamento de Ciencias Básicas
Para mí como docente este curso me invita a la lúdica, a ser capaz de desarrollar las potencialidades que tengo frente a la apreciación de la naturaleza desde lo artístico. Es un ejercicio muy grato, muy agradable y agradezco a la Universidad estos espacios donde nosotros crecemos no solamente como profesionales, sino como personas.